MIFAUNA

El collar educativo para perros consiste en un collar tradicional de poliuretano u otros materiales, al que se le ha unido una centralita electrónica que queda fijada en el collar de forma permanente.

 

El collar de adiestramiento se asocia directamente cuando nombramos "collar educativo", aunque también podíamos referirnos a los collares que tratan de educar al perro para que este no ladre cuando no deba.

 

El perro que lleva un collar educativo lo que porta en realidad es la centralita en contacto directo con la piel, en la zona baja del cuello.

 

Cuando el dueño del perro quiere transmitir un aviso para apercibir al perro, lo que hace es pulsar un mando a distancia que transmite una señal a la centralita.

 

Hay otros collares que funcionan de manera autónoma (sin que el dueño tenga que accionar el mando a distancia), por ejemplo con un sistema de reconocimiento de sonidos que reconoce el ladrido y envía la orden a la centralita.

 

Una vez que la centralita tiene la orden, aplica una vibración, un aviso sonoro o un estímulo electrostático para indicar al perro que cese en lo que está haciendo; lo que conocemos como aviso corrector.

 

Collares de Adiestramiento

 

Estos collares sirven para corregir ciertos hábitos, como por ejemplo que su perro no se salga de la parcela o cruce una carretera peligrosa.

 

Este tipo de collar funciona con un mando a distancia para que sea el dueño quien transmita la orden de advertencia en el momento que el perro la necesite.

 

El perro al recibir la orden (vibración, sonido o estímulo) asocia el aviso con la acción que acaba de realizar y corrige su comportamiento.

 

Collares Anti-ladridos

 

Estos collares llevan una centralita que reconoce los ladridos del perro y actúa cuando los detecta activando la orden de advertencia o el castigo para que el perro deje de ladrar.

 

Aunque el perro sea muy terco en poco tiempo corregirá su comportamiento puesto que aunque las vibraciones , sonidos y estímulos no son peligrosos, si que incomodan al perro llamándole la atención, por lo que enseguida asocian estos estímulos con su comportamiento y aprenden a comportarse.